San Andrés, Providencia y Santa Catalina
Desarrollaremos una estructura político administrativa para dar autonomía a la Región Insular - Seaflower integrada al Gran Caribe, reconociendo y exaltando al pueblo raizal. Esto estará aunado a un proceso de memoria histórica para reconocer el derecho a la verdad por la denominada “colombianización” del archipiélago.
El Archipiélago como corazón del Gran Caribe, será eje de la integración económica, ambiental, social, cultural, académica y científica con los pueblos hermanos. Se implementarán nuevos acuerdos y tratados de integración fronteriza con el Gran Caribe para el comercio justo y la protección y conservación ambiental entre los pueblos caribeños.
Protegeremos la Reserva logrando acuerdos con los países vecinos para hacer el corredor ambiental del Caribe Occidental o la Reserva Transfronteriza Gran Seaflower. Se impulsarán programas de vigilancia, control, protección, rehabilitación y recuperación de los recursos naturales y los ecosistemas, así como las Áreas Marinas Protegidas. Se protegerán los cuerpos de agua, en particular las subterráneas y los humedales. Desarrollaremos una política de mares que contemple el mar como un territorio integrado y articulado, que une a las comunidades de la nación colombiana y raizal.
Desarrollaremos el plan de reubicación voluntaria en el continente para las familias residentes no raizales de las islas que deseen salir del Archipiélago, con distintos estímulos como la educación gratuita en todos los niveles, incluyendo la educación superior sin límite de edad, una renta básica mínima y vivienda gratis.
Promoveremos la seguridad y soberanía alimentaria de las islas con incentivos a la producción local y relaciones comerciales con puertos cercanos a Centroamérica y el Caribe. Protegeremos los ecosistemas que prestan servicios de abastecimiento, implementando modelos productivos sostenibles, en especial los de particular interés para la pesca artesanal, la agricultura y el pago por los bienes y servicios del ecosistema marino. Se impulsarán las cooperativas de cabotaje para el abastecimiento de alimentos.
Se buscará que el turismo en la región insular sea sostenible sin que afecte el buen vivir de los habitantes del archipiélago en materia de acceso a servicios públicos de calidad.
